Empezamos oficialmente con el capítulo 2 del disco de Platina. Esta es la segunda escena que uno debe ver para avanzar en la ruta de Lhodo (más info de cómo van las rutas en el post completo de la traducción del juego), y además es una de las alternativas que tenemos para avanzar en la ruta de Jade (la primera que estoy traduciendo). Para obtener los finales con Jade, debemos ir turnando a los subordinados en las elecciones de este capítulo, ya que Jade se niega a acompañarnos a la batalla XD Lo digo porque hay que tener en cuenta que si vamos todo el tiempo con el mismo subordinado, avanzaremos en su ruta y no en la de Jade.
Por si acaso, el CG es un scan de mi Visualbook de Apocripha. Por eso se ve tan feo y raro D:! Pero es lo que hay u.u
Lo que estará en cursiva son tanto la voz del narrador como las indicaciones que pondré yo, para dar un poquito de contexto.
Platina Disc: Capítulo 02
Batalla - Lhodo 02
Capítulo
02: “Zumbido de alas”
(En
la carpa.)
Jade:
“Platina-sama~ Ya amaneció~”
Platina:
“...Ya lo sé.”
Jade:
“Vaya, qué inusual. Está despierto desde antes de que yo venga aquí.”
Platina:
“...Perdón por eso.”
Jade:
“Jajaja, es algo bueno. Si no lo encontraba despierto, planeaba hacerle
garabatos en la cara, eso sí. Qué lástima.”
Platina:
“...(Este maldito...)....”
Jade:
“Ahora bien, lamento tener que molestarlo cuando logró despertarse de buena
forma, pero tengo trabajo para usted.”
Platina:
“...¿Otra vez tomaremos la delantera y los atacaremos?”
Jade:
“Es verdad, eso tampoco sería mala idea, pero esta vez intentaremos atacarlos de
una forma distinta.”
Platina:
“¿...?”
Jade:
“Los habitantes de Naraku están constantemente expuestos a la amenaza del
Cielo. Eso ya lo sabe, ¿verdad?”
Platina:
“...Sí, claro, aunque aún no he peleado mucho.”
Jade:
“Eso es verdad. Después de todo, tomamos rutas por las que podríamos evitar
encontrarnos con ellos. Sin embargo, al dar un paso fuera de esas rutas, podrá
ver un mundo totalmente distinto. ...¿Le gustaría pelear contra ángeles?”
Platina:
“...Con los ángeles...”
Jade:
“Eso mismo. Los ángeles forman manadas y actúan en conjunto. De esa forma, atacan
las ciudades y caravanas, y las convierten en su alimento. Incontables ciudades
han sido destruidas por ellos, sobre todo últimamente, ahora que el poder del Rey de
Naraku ha disminuido. Si derrota a los ángeles, la gracia de la gente estará
con usted. Es matar dos pájaros de un solo tiro, ¿no cree?”
Platina:
“...Ya veo.”
Jade:
“¿Lo ha comprendido?”
Platina:
“Te refieres a que no actúe de forma directa mientras no conozca bien la fuerza
de mi enemigo ni la que tengo a mi disposición, sino que lo haga de forma
indirecta, ¿no es cierto?”
Jade:
“Correcto.”
Platina:
“...Entonces partamos de inmediato...”
(Sonido)
Platina:
“...¿Qué pasa?”
Jade:
“Qué alboroto hay afuera de la carpa, ¿eh? Puede que haya sucedido algo. ...Iré a
ver.”
Platina:
“Ok.”
(Jade
se marcha.)
Platina:
“Ángeles, ¿eh?... Seres vivos con alas. Distintos a nosotros. ...Asesinos
provenientes del Cielo...”
Ángel:
“...Urgh...”
Platina:
“¡...!”
Ángel:
“...Urgh... Matar...”
Platina:
“...Un ángel... ¿¡Y los otros qué están haciendo!?”
Ángel:
“¡...Matar... demonios! ¡...En nombre de Dios...!”
Platina:
“¡...Haré que te arrepientas de haberme desafiado a una batalla!”
(Batalla
Platina vs Ángel)
Ángel:
“...Uwaaa....”
(Desaparece
en partículas de luz.)
Platina:
“...Así que este es... el poder de los que tienen alas...”
(Llega
Lhodo a la carpa.)
Lhodo:
“¡Q-qué pasa, qué pasa! ¿¡Un incendio, una pelea!?”
Platina:
“Lhodo... ¡No dejes que estas cosas entren a mis aposentos!”
Lhodo:
“¡Uwaa, lo siento! ...Estaba comiendo, y terminé bajando la guardia...”
Platina:
“Por Dios... Por más que hayas llegado recién, esto es un gran error.”
Lhodo:
“Lo siento, en serio. ...Pero sí que eres fuerte, como es de esperarse.
¿Acabaste con él tú solo?”
Platina:
“Sí.”
Lhodo:
“...Este podía hablar, aunque fuese sólo un poco. Ese tipo de ángeles son
bastante fuertes.”
Platina:
“¿Ah sí...?”
Lhodo:
“Bueno, la verdad da lo mismo que si lo sabes o no. No cambia en nada que hay que
derrotarlos.”
(Sonido de pasos.)
Jade:
“Oh oh. Qué alivio que se encuentre bien.”
Platina:
“Vino en cuanto tú te fuiste.”
Jade:
“Ayayay, lo lamento mucho. Perdóneme.”
Lhodo:
“De tu boca sí que se escucha poco sincero.”
Jade:
“Oh, qué feo que diga eso. ...Dejando eso de lado, Platina-sama, venga por
favor.”
Platina:
“...¿Qué pasa? ¿Aún hay más?”
Jade:
“Una horda de ángeles se aproxima a una ciudad cercana. Sus principales
objetivos son matanza y alimento. Es la oportunidad perfecta para ganar el
favor de la gente. El fin de la Guerra de Sucesión llegará con la derrota del
Príncipe Alex. Usted obtuvo otras extremidades aparte de las propias. Me parece
adecuado que las utilice para estos fines.”
Lhodo:
“¡Perdón por ser simples extremidades!”
Jade:
“...Entonces tendrán que demostrar que son seres únicos. No hay nadie
irreemplazable en este mundo.”
Lhodo:
“......Kh, ¿ah sí?”
Platina:
“...Guíame hasta allá.”
(En
la montaña.)
Jade:
“Ya, entonces nos separaremos en dos equipos y bajaremos a la ciudad. Yo iré en
frente. Príncipe, por favor proceda sigilosamente y derrote al jefe enemigo
atacándolo por la espalda.”
Platina:
“¿Los ángeles también tienen jefes?”
Jade:
“Los ángeles, en su mayoría, se organizan en grupos. El que sean un equipo
implica que sea necesario que exista un líder. Cuando los números son altos, es
de esperarse que se produzcan relaciones verticales. En ese aspecto, los
ángeles y los demonios son iguales.”
Platina:
“...”
Jade:
“Lo importante es que, si derrotamos al líder, el grupo emprenderá la retirada.
Echémoslos de aquí antes de que destruyan por completo la ciudad. ¿A quién
llevará con usted, Príncipe?”
(¿A
quién llevará de compañero?)
Jade.
Platina:
“...Jade. ...Ven.”
Jade:
“...¿Eh? ¿Yo? Pero eso no se puede.”
Platina:
“¿Por qué?”
Jade:
“Porque, si nos dividimos en dos grupos, usted y yo debemos dar las órdenes,
Príncipe. Elija a otra persona, por favor. Yo también deseo mucho ir con usted,
eso sí.”
(¿A
quién llevará de compañero?)
Lhodo.
Platina:
“...Lhodo. ...Ven.”
Lhodo:
“Jejeje, entendido.”
Platina:
“Entonces, ya me voy.”
Jade:
“Vaya con cuidado. ...Por favor, no titubee ante los ángeles. Son el enemigo.”
Platina:
“Lo sé. ...Vamos.”
(Platina
se marcha.)
Jade:
“...Mientras lo entienda de verdad está bien. ...Hasta el fondo de su alma.”
(En
la ciudad.)
Platina:
“...Se ha armado un gran alboroto, ¿eh? ...Así que los ángeles están arriba...”
Lhodo:
“Están volando, así que obviamente estarán arriba. ¡Oye, ven aquí!”
Platina:
“...¿Por qué tú das las órdenes?”
Lhodo:
“¡Deja de quejarte y ven de una vez!”
Platina:
“...Yo soy el Príncipe.”
Lhodo:
“¡No te escucho~!”
Platina: “¡Escucha cuando la gente te habla!”
Lhodo:
“¡Si te quedas ahí parado sin hacer nada, la cosa se complicará aún más! ¡Date
cuenta!”
Platina:
“¡...!”
Lhodo:
“Enfrentar ataques de los ángeles no para todo el mundo. Sin embargo, si actúas
adecuadamente, hay ocasiones en las que puedes salir con vida. ¿¡Acaso tú
conoces la forma de sobrevivir en estos casos!?”
Platina:
“...No. Recién fue la primera vez que peleé contra un ángel, después de todo.”
Lhodo:
“Entonces deja de decir tonterías y sígueme. Por Dios, cómo es esta gente
importante.”
Platina: “...Ok.”
Lhodo:
“...Oh, qué obediente. ...Bueno, si se lo dejas a Lhodo-sama, todo saldrá
bien.”
Platina:
“...Después te daré una lección.”
Lhodo:
“Jeje, ok, entendido.”
Platina:
“...¡Da las órdenes rápido!”
Platina:
“¿Esos son... ángeles?”
Lhodo:
“Así es. Son muy molestos una vez que fijan un objetivo. Tanto que hasta a mí
me dan problemas. Ese tipo llamado Dios sí que debe ser malvado.”
Platina:
“...”
Lhodo:
“Aun así, a mí no me importa para nada si fui abandonado por ese sujeto, o si
me odia. Yo soy yo, y no dependeré de nadie. ...Es verdad que cargar con las
heridas duele bastante... pero no hay remedio.”
Platina:
“¡Claro que no está bien! ¡Nadie quiere eso, no hay a quien no le importe salir
herido!”
Lhodo:
“...No seas infantil. ...Esas son solo palabras bonitas.”
Platina:
“Lhodo...”
(Llega
Jade.)
Jade:
“Príncipe, hemos reunido al grupo en un solo lugar. ¡Le encargo que los
extermine!”
(Batalla
Platina & Lhodo vs Ángel x2)
Lhodo:
“¡Muy bien, ganamos!”
Platina:
“Ganamos, ¿eh?”
Jade:
“Felicidades, Príncipe.”
Platina:
“...No era necesario que yo fuese el que se enfrentase a ellos.”
Lhodo:
“Jaja, es verdad. Bueno, igual lo hiciste bien.”
Platina:
“...¿No fue suficiente?”
Jade:
“No, no, para nada. Pero aun así, pelear contra seres con alas es
complicado, ¿no?”
Platina:
“Es verdad... Ciertamente debería considerar de qué formas se puede
pelear contra ellos. Tendrán que enseñarme.”
Lhodo:
“¿Eh? ¿Que yo lo haga? ...Por mí no hay problema.”
Jade:
“...Es una bendición que cuente con buenos subordinados. Entonces, volvamos a
la carpa.”
Platina:
“...Sí...” (sonrisa)
(Mapa)
Jade:
“Príncipe, desde ahora deberá acabar con los ángeles junto a sus subordinados, para mantener la paz de
Naraku. Nosotros, como sus compañeros, pelearemos por
usted. El objetivo de la Guerra de Sucesión es que derrote al Príncipe Alex,
sin embargo, aún no hay movimiento por parte de él ni de la Capital. La orden
del Rey de Naraku es que se elija a un Rey fuerte, pero... si no podemos
encontrar a su rival, no hay nada que hacer. ...Bueno, tarde o temprano
averiguaré dónde están. Me gustaría que me esperara un poco. Los ángeles son el
enemigo de Naraku. El Cielo desprecia a Naraku. Por favor, Príncipe, utilice su
poder para protegernos de ellos. Conviértase en un Rey que sea más fuerte e
inteligente que todos los demás. Tenemos altas expectativas de usted. Yo
también las tengo. Ya, entonces comencemos otra vez el viaje.”
Siguiente escena:
- Platina Disc ~ Capítulo 2: Lhodo 03
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